El aceite de orujo de oliva es uno de los grandes desconocidos dentro del mundo de los aceites. Aunque su nombre pueda sonar menos familiar que el del virgen extra, se trata de un producto con un importante valor en la gastronomía y la industria alimentaria.
Este aceite se obtiene a partir del orujo, es decir, los restos sólidos de la aceituna (piel, hueso y pulpa) que quedan tras la primera extracción del aceite de oliva virgen. Gracias a un proceso controlado, se logra un aceite estable, versátil y con interesantes aplicaciones.
En los últimos años, el aceite de orujo ha ganado protagonismo por sus cualidades para la fritura, su rentabilidad y su aporte nutricional, lo que lo convierte en una alternativa a tener en cuenta dentro de la cocina profesional y doméstica.
En este artículo vamos a profundizar en qué es el aceite de orujo de oliva, cuáles son sus propiedades, diferencias frente al aceite de oliva tradicional y resolveremos las dudas más frecuentes sobre su consumo y usos.
Propiedades del aceite de orujo de oliva
El aceite de orujo de oliva destaca por su composición equilibrada de ácidos grasos y antioxidantes naturales. Gracias a ello, es un aceite estable frente a las altas temperaturas y muy apreciado en la cocina.
Una de sus propiedades más interesantes es su alto contenido en ácido oleico, un ácido graso monoinsaturado beneficioso para la salud cardiovascular. Este componente también está presente en el aceite de oliva, aunque en el orujo se combina con otros compuestos que le otorgan resistencia térmica.
Además, el aceite de orujo contiene pequeñas cantidades de compuestos bioactivos como los tocoferoles (vitamina E) y los esteroles vegetales, conocidos por su papel antioxidante y protector.
Otra de sus grandes ventajas es su estabilidad al freír. Mientras otros aceites se degradan rápidamente con el calor, el aceite de orujo de oliva mantiene mejor sus propiedades, permitiendo un uso más prolongado y seguro en la cocina profesional y doméstica.
En definitiva, se trata de un aceite con propiedades que combinan valor nutricional, versatilidad y resistencia, lo que lo convierte en un ingrediente clave en distintos ámbitos culinarios.
¿Es bueno el aceite de orujo de oliva?
El aceite de orujo de oliva es considerado un aceite saludable siempre que se consuma dentro de una dieta equilibrada. Su aporte de ácido oleico contribuye al cuidado del corazón y al mantenimiento de niveles adecuados de colesterol.
Además, al ser un aceite muy estable al calor, es una opción segura y práctica para cocinar y freír, evitando la formación rápida de compuestos indeseados.
En resumen, sí: el aceite de orujo es una alternativa válida y recomendable, especialmente para usos culinarios donde se necesite resistencia y rentabilidad.
Diferencias entre el aceite de orujo y el aceite de oliva
Aunque comparten origen en la aceituna, el aceite de orujo de oliva y el aceite de oliva presentan diferencias importantes:
- Origen del producto:
Aceite de oliva: se obtiene directamente del zumo de la aceituna mediante prensado o extracción en frío.
Aceite de orujo de oliva: se elabora a partir de los restos sólidos de la aceituna (orujo), aprovechados mediante procesos controlados.
- Método de extracción:
Aceite de oliva virgen y virgen extra: extracción mecánica, sin aditivos químicos.
Aceite de orujo de oliva: refinado y mezclado con aceite de oliva virgen para mejorar su calidad.
- Sabor y aroma:
Aceite de oliva virgen extra: intenso, afrutado y con matices propios de la variedad de aceituna.
Aceite de orujo: sabor más neutro, ideal para cocinar sin alterar los alimentos.
- Resistencia al calor:
Aceite de oliva: puede perder propiedades tras varios usos en fritura.
Aceite de orujo de oliva: mucho más estable y duradero en altas temperaturas.
- Usos principales:
Aceite de oliva virgen extra: recomendado en crudo, ensaladas o platos donde el sabor sea protagonista.
Aceite de orujo: perfecto para freír, cocinar grandes cantidades y uso en hostelería.

Dudas sobre el aceite de orujo de oliva
Una vez ya tenemos claro qué es el aceite de orujo de oliva, así como sus propiedades y diferencias con el aceite de oliva, vamos a tratar de resolver las dudas más concurridas sobre el aceite de orujo de oliva:
¿Para qué se usa el aceite de orujo de oliva?
El aceite de orujo de oliva se utiliza sobre todo en la cocina, especialmente en frituras y preparaciones que requieren altas temperaturas. Su sabor neutro lo convierte en una opción ideal para freír sin alterar el gusto de los alimentos. Por esta razón es muy demandado en la hostelería y en hogares donde se cocina de forma habitual.
Además, también tiene aplicaciones en la industria alimentaria y, en menor medida, en el sector cosmético por su contenido en compuestos antioxidantes.
¿Cuánto aceite de orujo de oliva puedo consumir al día?
No existe una cantidad exacta obligatoria, pero los expertos recomiendan moderar el consumo de cualquier aceite dentro de una dieta equilibrada. Una orientación saludable es usar entre 3 y 4 cucharadas soperas diarias de aceites vegetales, entre los que se puede incluir el aceite de orujo de oliva.
Lo importante es integrarlo en una alimentación variada y complementarlo con otros productos de calidad, como los que encontrarás en las experiencias de oleoturismo de La Almazara.
¿Qué beneficios tiene el aceite de orujo de oliva?
El aceite de orujo aporta beneficios relacionados con la salud cardiovascular gracias a su alto contenido en ácido oleico. Este ácido graso monoinsaturado ayuda a mantener niveles adecuados de colesterol y a cuidar el corazón.
Otro de sus beneficios es su estabilidad al calor, lo que lo convierte en una opción más segura para freír en comparación con otros aceites vegetales que se degradan con rapidez. También contiene antioxidantes naturales, como los tocoferoles, que ayudan a proteger las células frente al daño oxidativo.
¿Cuál es el mejor aceite de orujo de oliva?
El mejor aceite de orujo de oliva es aquel que ha sido refinado bajo estrictos controles de calidad y que se mezcla con una parte de aceite de oliva virgen para garantizar sus propiedades organolépticas.A la hora de elegir, es recomendable optar por marcas que apuesten por la sostenibilidad y la producción ecológica, valores que forman parte de la filosofía de LA Almazara LA Organic, donde la tradición y la innovación se unen para ofrecer aceites de la máxima calidad.